Comunicado de los y las Trabajadores/as de la Estación Experimental y las Agencias de Extensión Rural Agropecuaria de la EEA INTA Marcos Juárez.

Duro y contundente rechazo de los empleados y empleadas del INTA Marcos Juárez a las medidas tomadas por el Gobierno Nacional.

Nosotros, los trabajadores y trabajadoras de la EEA Marcos Juárez y sus Agencias de Extensión Rural, queremos manifestar nuestro profundo malestar, indignación y categórico rechazo ante la grave situación institucional que atraviesa nuestro organismo como consecuencia del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 462/2025, publicado el 8 de julio de 2025.

Esta medida, que elimina la autarquía del INTA y lo subordina jerárquicamente a la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía, representa un retroceso inaceptable. Lejos de significar una modernización, implica una centralización del poder, la pérdida de su histórica autonomía de gestión, y la desarticulación de su modelo federal, participativo y técnico, que ha sido clave para su prestigio nacional e internacional desde su creación en 1956.

El INTA no es solo un organismo del Estado: es una institución estratégica para el desarrollo agropecuario, tecnológico y social de la Argentina. Desde nuestra EEA Marcos Juárez y todas sus Agencias de Extensión Rural, investigamos, desarrollamos, capacitamos, transferimos conocimientos, acompañamos al productor, generamos soluciones innovadoras para el agro y para las comunidades rurales, y sostenemos con hechos concretos la soberanía tecnológica y alimentaria del país.

La vasta red de acción territorial, sustentada en una gobernanza pública, participativa y representativa, está hoy amenazada por un decreto que suprime los espacios de decisión compartida, transformando al Consejo Directivo en un órgano meramente consultivo, quitándole a las provincias, universidades y al sector productivo su histórica voz en el rumbo del INTA.

El argumento de la eficiencia no puede justificar una decisión que concentra las decisiones en una figura política unipersonal, politiza una institución esencialmente técnica y pone en riesgo la continuidad de políticas públicas estratégicas para el desarrollo rural, la seguridad alimentaria y la competitividad agroindustrial.

Además, advertimos con suma preocupación que la eventual disposición o venta de bienes e infraestructuras consideradas «innecesarias» por la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) podría afectar directamente el funcionamiento de nuestras Estaciones Experimentales, campos de ensayo, laboratorios y estructuras operativas. Estos espacios no son solo edificios: son centros vivos de generación de conocimiento y desarrollo.

La historia del INTA es la de miles de trabajadores comprometidos con el presente y el futuro del país, en cada rincón del territorio nacional. Defender al INTA es defender el campo argentino, la ciencia nacional, y el derecho de nuestros pueblos a un desarrollo sostenible, equitativo y soberano.

Por todo lo expresado, instamos a las autoridades nacionales a rechazar de forma urgente las disposiciones del DNU 462/2025 y a abrir canales de diálogo reales con quienes formamos parte activa de esta institución. No se puede gobernar desde la distancia y sin escuchar a quienes día a día trabajamos con y para los productores de este país.

Desde la EEA Marcos Juárez, como trabajadores del INTA, reafirmamos nuestro compromiso con el conocimiento, la producción, el territorio y la Nación. En este marco, solicitamos el apoyo y adhesión de las entidades representadas en los distintos ámbitos de gobernanza (Consejo Regional y Consejos Locales Asesores de la Estación Experimental y de la Agencias de Extensión Rural).

Finalmente, reafirmamos nuestra convicción de mantenernos firmes en la defensa del carácter público, autónomo, federal y técnico de nuestra institución.

El INTA no se toca. El INTA se defiende.